Estética posmoderna
sustantivas andan
las palabras
no tienen lugar
los accidentes
mujeres
sin perfumes
ni carteras
evas
sin adán
sin paraíso
Fuente: Entreluces, Alfredo Jorge
Maxit, UCALP, La Plata, 1996.
Llamado
Llama alguien
a la puerta
a la ventana
algo
alga
el mar
la noche.
Con la primera luz
las abejas están
sobre el cáliz
de la flor
callada
toda
ví
a
Fuente: De Lengua y literatura y
Poemas de aquí y ahora, Alfredo Jorge Maxit, La Luna Que, Buenos Aires, 2001.
Finitud
Finalmente, ahí
están
–como en foto–
las ganadoras.
Faltan las salidas
de los márgenes,
las que también
tuvieron
presente de página.
Bailarinas
de resignados
mutis.
Multitud de voces
inconsultas
entre sombras
callan
formas infinitas
del infinito poema.
Fuente: Con las palabras, Alfredo Jorge
Maxit, La Luna Que, Buenos Aires, 2005.
Auxilio
Con una molestia de
cinco centavos,
una pensión de
gracia que no alcanza
para vivir, el
ciego
transita el vagón
de la noche.
Cualquier moneda
sirve
de fósforo.
Fuente: Sombras de luz, Alfredo Jorge
Maxit, La Luna Que, Buenos Aires, 2007.
Del pozo
La infancia tenía
un pozo
y no faltaba un
balde
que bajara a
buscarla.
Hados sucesivos
fueron
tapando la boca
fresca.
Calló la roldana
la arrojada
costumbre
de otro viaje.
Fuente: Sombras de luz, Alfredo Jorge
Maxit, La Luna Que, Buenos Aires, 2007.
Parábola
Pedía subir al
monte de las promesas,
alcanzar la gracia
de presentir el Reino.
No advirtió la luz
tras las persianas,
el repartido pan de
cada día.
Fuente: En tránsito, Alfredo Jorge
Maxit, La Luna Que, Buenos Aires, 2008.
Del ser
Copa infinita de
árbol
que no devuelve el
río.
La Nada tampoco
habita los espejos.
Pretensión de
mortales
extenderse en los
nombres.
Fuente: Cada luz, Alfredo Jorge
Maxit, La Luna Que, Buenos Aires, 2011.
Alfredo Jorge Maxit nació en Colón, Provincia de Entre Ríos, en 1942.
Es Profesor en Letras. En 1966 se trasladó a Buenos Aires y en esta ciudad vivió
hasta 2008, año en el cual, tras jubilarse, regresó a Colón. Entre 1990 y
2008 trabajó, asimismo, en la Dirección del Departamento de Formación Cultural y Creatividad de la Universidad Católica de La Plata, lo que le permitió vincularse con numerosos poetas
y escritores platenses, algunos de los cuales dieron pie a sus trabajos
críticos y ensayísticos. Su obra poética publicada incluye los siguientes
libros: Entreluces (1996), De Lengua y Literatura y Poemas de aquí y ahora (2001), Con las palabras (2005), Des/habitaciones (2006), Sombras de luz (2007), En tránsito (2008), La poesía desde los poemas (2009) y Cada luz (2011). De su obra en prosa
cabe destacar: Cuentos de vida y nada
(narrativa), Del transeúnte imaginario
(narrativa), Y cierro los ojos
(narrativa), Cuento sonámbulo
(narrativa), El curioso impertinente
(teatro), Los milagros de Nuestra Señora
y la vecindad humana de Gonzalo de
Berceo (ensayo), Los hilos de oro de
las coronas líricas de Fray Luis de
Tejeda y Guzmán (ensayo), Agua del
buen manantial. Homenaje a Antonio
Machado (ensayo), La razón doliente
y los signos del jardín. Una lectura
de la obra poética de César Cantoni (ensayo), El antiguo valle de Roberto
Themis Speroni, un fragmento de eternidad (ensayo), Anotaciones de Horacio
Castillo a su poesía y otras notas amigas (ensayo y recopilación de textos)
y La cartera del padre Lantelme (ensayo hitórico-literario). Para Rafael Felipe
Oteriño, “...Alfredo Maxit es un poeta del pensamiento y de la reposada
meditación –también lo es de su otra cara: la del dramatismo interior–,
queriendo decir con esto que se vale del verso como instrumento para ir más
hondo y más lejos. Su capacidad para poner al descubierto la condición
reveladora de la palabra poética lo muestra como un laborioso explorador de lo
indecible. Cada vocablo tiene cabida en el poema por su sonoridad, pero
rápidamente se convierte en el haz de luz que busca indagar la huella de lo
indeterminado”.
Foto: Alfredo Jorge Maxit, Fuente: Gentileza de
Alfredo Jorge Maxit.
No hay comentarios:
Publicar un comentario